01/02/07 11:46:11




BUSCAR PAREJA EN INTERNET: OPCIONES AVANZADAS



Mercè Molist
Abuelo busca abuela. China busca chino. Judío busca judía. Los estudios psicológicos dicen que ansiamos a un igual en el amor y los portales cibernéticos para buscar pareja siguen el consejo. En Estados Unidos, triunfan los sitios cada vez más especializados, que ponen en contacto a nichos muy concretos de la población. Ahora, la moda es encontrar pareja cuando ya se han cumplido los 50.

A mediados de 2004, el portal de contactos por excelencia en Internet, Match.com tenía un problema: perdía dinero y clientes en Estados Unidos, su principal mercado. La gente prefería el, por aquel entonces, nuevo fenómeno de las redes sociales, como Orkut o Myspace, no concebidas para encontrar pareja pero sí para hacer amigos y una cosa llevaba a la otra.

Match arrastraba además el "handicap" de ser un sitio generalista, abierto a todo el mundo, mientras a su alrededor triunfaban portales de relaciones cada vez más especializados como Jdate, sólo para practicantes de la religión judía; BlackPlanet, para la población afroamericana, o PlanetOut, un éxito entre la comunidad gay.

La única salida era seguir también la ola de la especialización. Match contrató a un experto en marketing, Jim Safka, quien recomendó a la empresa centrarse en las personas divorciadas y las mayores de 50 años, siempre en el campo de la búsqueda de relaciones serias y estables.

Safka había realizado un estudio que concluía que las personas mayores gastaban más dinero que los jóvenes en este tipo de portales, era más fácil que comprasen una suscripción de pago y, además, que esta fuese para periodos más largos.

Esto conllevó diversos cambios de diseño en el sitio, basados en la observación del comportamiento de la gente mayor en Match.com, con el objetivo de que se sintiesen a gusto. La idea directriz era que las personas de más de 50 no solían ser expertos internautas y precisaban que todo estuviese muy claro.

Por ejemplo, se añadieron ventanas de ayuda en todas las funciones, que explican a los nuevos usuarios cómo navegar por el sitio. También se eliminaron del formulario de inscripción preguntas inadecuadas, como "¿Cuántos tatuajes y 'piercings' tienes?". Y se añadió un botón llamado "No Gracias", para deshacerse automáticamente de amantes insistentes.

La fórmula funcionó: hoy, Match tiene 1,3 millones de usuarios de pago en Estados Unidos y el 23% supera los 50 años. Incluso le han salido imitadores: Yahoo! Personals ha doblado las visitas de esta franja de edad gracias a ofrecerles mayor privacidad y seguridad. Otro tanto ha sucedido en eHarmony, donde la gente mayor es el segmento con mayor crecimiento.

"Si lo construyes, ellos vendrán", decía una voz a Kevin Costner en la película "Campo de Sueños". Y así ha sido: Estados Unidos vive un acceso a la red cada vez más generalizado entre la gente mayor con poder adquisitivo. Crear servicios para ellos es apostar sobre seguro. Como ha hecho America Online, que recientemente inauguraba un sitio de salud para este "target".

El cambio de filosofía de Match ha permitido a la empresa distanciarse de su principal competidor, la empresa francesa Meetic, que a su vez se ha especializado en gente joven a la busca de un ligue, frente a la relación estable que promete Match. En Europa, existe la misma dicotomía entre los portales alemanes Be2, para parejas mayores y serias, y Friendscout24, para ligar.

Pero Europa está a años luz de Estados Unidos en lo que al amor en línea se refiere. Aquí es una rareza, mientras que un estudio del Pew Internet & Amercian Life Project asegura que el 15% de norteamericanos adultos conocen a alguien que ha iniciado una relación estable por Internet, el 31% tiene algún amigo registrado en un portal de contactos y el 61% no creen que estos sitios sean nidos de solitarios y desesperados.

La situación es diferente en España, a pesar de ser el segundo país de Europa que más usa estos portales. De los 1,3 millones de usuarios activos de Match España, sólo 50.000 superan los 50 años. "No tiene nada que ver con Estados Unidos, pero todo se andará. De momento, el número de internautas de estas edades es muy bajo en España, lo que explica que también lo sea el de usuarios del portal", explican fuentes de Match.com.

Aquí, dominan el mercado los portales generalistas, que suman millones de visitas mensuales, pero no hay lugar para los especializados: "Es verdad que se busca a gente afín, con intereses compatibles, porque las posibilidades de éxito de la relación son más altas. Pero sería difícil que en España pudiesen sobrevivir empresas tan especializadas como en Estados Unidos, porque estamos aún en la fase de dar a conocer el servicio", afirma Sonia Fernández, directora general de Match España.

De momento, la única especialización está en los portales para homosexuales y, dentro de los generalistas, la que ofrecen los buscadores y programas de compatibilidad: el usuario o usuaria rellena un formulario que el programa analiza y compara con otros para sugerirle personas compatibles. Por su parte, el usuario localiza con el buscador a posibles parejas según su edad, estado civil y otros parámetros.

"De alguna manera, puede parecer una compra por catálogo, pero es más cómodo y relajado y una gran ayuda para la gente que no tiene tiempo", explica Marc Sorlis, director de marketing del Salón Singles. "Internet abre posibilidades increibles para ligar y no sólo en estos portales sino en cualquier zona de la red", añade.

Las comunidades en línea, los blogs o el Messenger, a pesar de no haber sido creados para encontrar pareja, explica Sorlis, "facilitan mucho el relacionarse en una época en que es difícil hacerlo de forma tradicional. ¡Si estamos todos ligando en el gimnasio! ¿Quién nos lo habría dicho?".




AMOR AÑEJO EN GUADALIX


A sus 68 años, Inge Kladeck ha tenido una vida agitada: hija de padres alemanes, nacida en Bolivia, criada en Argentina y residente en España. "Me quedé viuda en octubre de 2004 y sentía una soledad tan tremenda que decidí inscribirme en Match.com a medidados de diciembre", explica.

Recibió diversos mensajes de señores interesados, con quienes hizo amistad. "Per hubo uno que me llamó la atención de manera especial y desde un principio, un "navarrico" de Pamplona". Era Pedro Bayona, 69 años. "Al mismo tiempo y de la misma manera, él también sintió atracción por mí y, en sus mensajes, se refería a mi como "mi media novia"", recuerda.

Cuando la magia estaba en el punto álgido, empezó a tomar tintes de culebrón: Inge tuvo un problema con su cuenta particular de correo y durante un mes no recibió ni pudo enviar mensajes. Creía haberle perdido pero, cuando volvió a escribir, él respondió.

Pocas semanas después, surgió un nuevo obstáculo: "No me vino a ver en febrero como habíamos quedado y para mi fue una desilusión", recuerda Inge. Pero, dos meses después, reiniciaban el contacto epistolar: "Mi corazón sintió lo mismo que la primera vez y él me decía que lo había embrujado".

Por fin, el 29 de julio tuvieron su primera cita: "Viajó toda la noche hasta mi pueblo, Guadalix de la Sierra. El tenía muchas fotos mías, pero yo no, ni nunca me llamó por teléfono, o sea que mi sorpresa fue doblemente bonita al verle y sentir que no me había equivocado. Nada más bajarse del autobús nos dimos nuestro primer beso de amor".

Hoy, Inge y Pedro viven juntos en Guadalix, "en una continua luna de miel", explica ella. Acaban de celebrar su año y medio de pareja con la misma adoración mutua: "Por la mañana, me llenó la mesa de flores y después me invitó a comer. Somos inmensamente felices".




MUJER CONTRA MUJER


Carmen y Charlotte acaban de casarse la una con la otra. Tienen 28 años y se conocieron en la zona de contactos del portal español Chueca.com. Carmen vivía en Perú y era profesora en una escuela infantil. Charlotte es alemana y diseñadora gráfica del periódico "Bild".

"Hacía más o menos un año que estaba en Chueca.com", explica Charlotte. Carmen acababa de llegar y empezaron a cartearse a través del portal. Dos semanas después se comunicaban intensivamente por el servicio de mensajería instantánea Messenger: "Horas y horas escribiéndonos cada día, escuchando nuestra canción, "Milagro de Abril", y cada vez con más emoción", recuerda Charlotte.

Un mes después, Charlotte decidió irse dos semanas de vacaciones a Perú: "Era una decisión muy rápida pero también muy segura de lo que estaba haciendo, nos moríamos de ganas de vernos", asegura. Y, al llegar allí, todo fue perfecto: "El mejor día de nuestra vida", recuerda.

Las dos semanas pasaron volando: "Incluso, no queríamos dormir para no perder ningún segundo juntas. Ya era imposible, después de estos días, pensar en estar separadas", explica Charlotte. Así que decidieron volver juntas a Alemania.

El destino les dio un respiro en forma del consabido papeleo para conseguir un visado y Charlotte volvió sola a su casa. Cuatro meses después, llegaba Carmen. Se casaron el 29 de septiembre del año pasado en Frankfurt y hoy se declaran: "Una pareja muy feliz, gracias a Chueca.com".

Los portales especializados en la comunidad homosexual son los únicos rentables en España, junto a los generalistas. Chueca.com es el más veterano y popular, no sólo aquí sino a nivel internacional, como muestra el ejemplo de Carmen y Charlotte. Nacido en 1997 y actualmente propiedad de Ya.com, su zona de contactos tiene más de 130.000 usuarios registrados de los que el 18% son mujeres.




ROMANCE EN LA SINAGOGA


Michele y Ben viven en Florida y son judíos. No tení­an pareja y decidieron, cada uno por su lado, registrarse en JDate, un portal dedicado exclusivamente a los practicantes de esta religión que anhelan encontrar el amor. JDate, fundado en 1997, reúne a cualquier hora del día más de diez mil usuarios a la caza de su media naranja.

Ben vio la foto de Michele y le mandó un "mail". Se gustaron y pasaron un mes "chateando" hasta que decidieron conocerse. Quedaron para cenar en un restaurante chino: "Era mi primera cita a ciegas y estaba nerviosa", explica Michele, pero los nervios pronto desaparecieron: "Nada más verle, me sentí atraída. Él me contó después que, tras 30 minutos de conversación, pensó que yo podía ser "ella"".

La historia sigue como muchas otras: un año y medio de noviazgo y, durante un viaje a Budapest, en la sinagoga de Dohany, Ben pidió a Michele que se casase con él. Cuentos de amor parecidos se suceden en otros portales dedicados a emparejar a practicantes de una misma religión, como Christian Dating, para cristianos. O Big Church que, en el colmo del detallismo, se dirige a los cristianos que además sean hispanos y vivan en Estados Unidos.

Otros sitios se especializan en razas: BlackPlanet cuenta con la friolera de 15 millones de usuarios afroamericanos y AsianEuro se dirige a las personas asiáticas. "Estos sitios "nichos", muy especializados, son frecuentes en Estados Unidos, los hay también para científicos o para gente que ha ido a determinadas universidades", explica Sonia Fernández, directora general de Match.com.




Copyright 2007 Mercè Molist.
Verbatim copying, translation and distribution of this entire article is permitted in any digital and no commercial medium, provided this notice is preserved.
 


<<