23/05/2005 18:16


Savage: El tercer hombre


"Si buscas los tres pies al gato, al final los encuentras"


Jordi Murgó, más conocido en el "under" como Savage, es una leyenda del hacking hispano. Testimonio de una época, cuando los hackers aprendían a ser hackers, fue miembro de un grupo, Los Apòstols, también legendario. Savage es un gurú, un hacker puro (un puro "coder"), accesible como pocos. Campechano, vital, hoy le absorbe su propia empresa, donde el hacker se ha convertido en mercenario. Pero en su núcleo sigue brillando esa luz blanca...


-Cuéntame sobre ti.
-Tengo 36 años, estoy casado, con dos hijos de 10 y 6 años, que utilizan Linux en el escritorio desde hace unos años.
-Eres hijo de campesinos. Siempre he pensado que son los hackers primigenios.
-Son muy apañados, hacemos de la necesidad una virtud y aprendemos a hacer de McGiver. La falta de recursos propicia soluciones imaginativas.
-¿Este origen tiene algo que ver con tu camino?
-Absolutamente. Como todos los críos de la zona rural donde vivía, iba en bicicleta, hacía escopetas para disparar gomas con pinzas de tender la ropa, nos hacíamos escondites, jugábamos a guerrillas tirándonos peras y manzanas, nos comíamos las fresas de los vecinos. Siempre he sido curioso y en casa no quedaba trasto por desmontar. Había un juguete que me marcó: Eletro L.
-¿Cuesta sudor y lágrimas ser un gurú?
-No, si no eres obsesivo. Las cosas que te gustan de verdad son un juego. Lo ha sufrido más la gente de mi entorno. Es difícil convivir con alguien que no puede evitar poner la neura por encima del resto de cosas.
-¿Alegrías?
-Cualquier reto con suficiente dificultad me reporta una gran satisfacción cuando lo consigo. No sé si ver por primera vez la luz de "Carrier Detect" en el módem me produjo más satisfacción que deducir la primera combinación de login/passwd para entrar en un Unix conectado a la red X25 (era carmen/carmen), o poner en marcha un programa que parece descabellado y ver que funciona. Todo produce una sobredosis de adrenalina indescriptible.
-¿Cuántos SO y lenguajes informáticos dominas?
-Ahora, sólo Linux, pero puedo convivir con cualquier Unix clásico. Conozco Windows XP y NT, y Mac OS/X superficialmente. Aunque años atrás utilicé muchas cosas, en los últimos 5 años he programado en C, Java, PHP, Pike, Perl, JavaScript, ActionScript, PIC-Assembler y AVR-Assembler.
-¿Algún handycap?
-Mi inglés es poco fluido. Y acabar la carrera de Informática.
-¿Cuándo y dónde te conectaste por primera vez?
-En 1987, con un módem que me regaló alguien de Telefónica, a una BBS de Vilanova i la Geltrú. Estaba abandonada. La gente se conectaba, dejaba mensajes, pero no había un responsable. Después, a la BBS Libro de Arena, en Barcelona y, a partir de aquí, había 10 o 15 en España en aquel momento, las visitas todas y al final te metes en una. Entré en Fidonet. Había salido RedBBS pero me gustaba más Fidonet, por el software, y al final intentamos que todo fuese una misma cosa, hicimos una red bastante maja, en Catalunya.
-¿Visitabas también BBS de fuera del estado?
-Sí, por toda Europa, buscando áreas de mensajes interesantes, sobre todo en Inglaterra y Francia, porque podías entenderlo. Para temas de software de MSX, Japón. Y para temas de hacking, las BBS americanas. Al final, era una fortuna cada mes en llamadas telefónicas, cuando tocaba pagar.
-¿Hacías phreaking?
-Hombre, se tenía que hacer. Si no, no podías mantener aquello. Hasta el 92, era muy fácil. Las primeras llamadas pagando que haces a fuera, lo primero que te bajas son los ficheros de cómo llamar gratis. Y, con la información que sacas de EEUU, intentas averiguar qué puedes hacer aquí, no es exactamente igual, pero probando mucho y con un poco de información de dentro de Telefónica, que nadie sabe cómo la pides y tal... Después, a esperar la factura a los dos meses, para saber si la cosa ha funcionado. Y no era fácil, porque entonces no llegaban detalladas.
-¿Habías construído blueboxes?
-Claro. La gente de Apòstols, un poco hicimos grupo por el tema del blueboxing, para poder seguir con el vicio.
-¿Intercambiábais información?
-Sí. Formas de llamar, algún vecino, te enganchabas donde podías, colgabas cables en las fachadas... Pero después intentas hacer algo más estable, que no tengas que ir jugándotela, porque sabes de conocidos a quienes han acabado cogiendo. Tienes que hacer algo más limpio.
-Y lo más limpio es...
-El blueboxing, en aquel momento. Enviar tonos a la línea para que las centrales remotas piensen que eres una central y no un usuario y  hagan caso de tus órdenes: ahora, esta llamada que era gratis, córtala y me envías a EEUU.
-Los programas que hacías para MSX fueron usados mundialmente, ¿cómo los difundías?
-Entonces no había Internet y lo que hacía la gente era enviarse sobres llenos de disquetes los unos a los otros. Se anunciaban a través de revistas: intercambio programas MSX o PC. Mis programas iban saliendo en revistas, la gente tenía amigos que llegaban a las BBS desde PC y les decían: para MSX también hay un programa, etc.
-Tú, entonces, no tenías PC.
-Cuando hice el primer programa, no tenía ni disquetera. No podía bajar ficheros, era sólo para emular la terminal de conexión.
-A los 18 años entras a trabajar en Telefónica.
-Casualidades de la vida. Estaba estudiando y apuntado en el paro. Me hicieron una prueba, un psicotécnico, no era ni una prueba de aptitud, y nos cogieron a prácticamente todos los que veníamos de electrónica.
-¿Qué te llevas de la experiencia en Telefónica?
-Muchos amigos. El ambiente era similar al de hoy en el software libre: cuando eres técnico de una central, estás solo ante un monstruo que tiene millones de contactos, centenares de miles de relés. Estás tú solo y un armario con el código fuente, los mapas de toda la central. Si hay una avería, tienes que arreglarlo tú, no hay nadie. Es como los inicios del soft libre: aquí tienes el programa y el código fuente, si falla algo, coge el código y arréglalo. La gente compartía las experiencias, posibles soluciones: si pasa esto, pon un palillo entre un contacto y otro. Además, estuve unos años de sindicalista y fue muy divertido.
-¿Cuándo te pones el apodo Savage?
-Al final de Apòstols, porque no me gustaba el nombre que tenía allí.
-¿Qué nombre tenías?
-"El tercero", porque era el tercer apóstol. Primero fueron dos chavales de Barcelona y yo era el tercero.
-El grupo duró poco, sólo del 89 al 91...
-Servía para hacer hacking en sistemas operativos que no tenías en casa. Pero el año 90 empieza a haber Unix disponibles y el 92 tienes Linux y FreeBSD en todas las BBS. Entonces, ya no necesitas jugarte el tipo y estar conectado de noche. Lo hacías porque te lo pasabas bien, querías conocer más cosas, hacías programas, probabas cosas. En el momento que puedes hacerlo en casa... Y en poco tiempo tienes Internet. Ya no hay tanta necesidad de acceder ilegalmente a nada, pierde un poco el sentido. Llamar gratis también se complica: el 92, se digitalizó la red que interconectaba la red nacional y queda registrado el origen y destino de las llamadas, es más fácil seguirte. 
-¿Qué gracia tenía entrar en las redes X25?
-Primero, no sabíamos llamar gratis y, si querías contactar con gente un poco "underground", o llamabas directamente a BBS americanas o alemanas o no tenías otra salida. Pero, a través de una llamada local, tenías acceso a X25. Lo único que necesitabas era un login y un password y, a partir de aquí, podías saltar a los chats franceses de la red Minitel. Primero, accedías a través de las universidades y, en los chats, conseguías métodos para acceder a cuentas directas de X25. Aprendías a hacer hacking social, a llamar por la noche a operadores pidiéndoles directamente el login y password.
-¿Y cuando los tenías?
-Entonces, utilizabas las redes X25 para seguir conectado con tus compañeros, básicamente a través de un chat francés que se llamaba QSD, un chat gay de la red Minitel. Los hackers de toda Europa, algunos americanos, entrábamos por la puerta de atrás, por la red internacional X25, y la primera pregunta que nos hacían en el chat era: "¿Eres hacker o gay?". A partir de aquí, ibas encontrando a gente, te pasaban otros chats, pero el punto de encuentro era QSD, porque las conexiones X25 tenían un límite de conexiones simultáneas y el de QSD era el más grande de todos, nunca comunicaba. En cambio, los chats que podíamos montar en universidades o sistemas que asaltábamos tenían un número limitado de conexiones simultáneas y lo montabas para 4 o 5 amigos.
-O sea: os conectábais para conseguir información para seguiros conectando.
-Sí, es la droga, la afición. Primero, porque habíamos visto la película "Juegos de Guerra" y también porque es divertido y, si consigues un Unix, puedes montar un chat donde ir con los amigos cuando los otros están llenos. Además, quedaba muy bien decir que habías montado un chat.
-¿Entrábais también en redes de EEUU?
-Igual. Las redes X25 estaban unidas. Los nodos de entrada de X25 americanos estaban mal configurados y, si entrabas por detrás, tenías un módem con una conexión telefónica al otro lado y lo podías usar para conectar a donde quisieras del mundo. Sólo necesitabas la lista de nodos, que era fácil de conseguir: cuando entrabas en una universidad americana, mirabas quién estaba conectado y te salía una lista con el número identificador de la puerta de entrada a la red que había utilizado. Si conectabas con aquel identificador, cuando el usuario no estaba, algunos operadores lo tenían mal montado y, haciendo poca cosa, AT OK, ya tenías el módem allí. Circulaban listas con cuentas que todo el mundo conocía, una de ellas era RMS, la de Stallman, en una máquina del MIT, sin password. Pero una cuenta que siempre está allí no tiene mucha gracia, no la puedes intercambiar porque todos la tienen, como un cromo repetido.
-¿Entrasteis en el ordenador del libro "El Huevo del Cuco"?
-MITRE era un suministrador del ejército norteamericano que estaba muy bien comunicado con todas las redes activas entonces. Había un menú de entrada para acceder a un servicio de directorio de teléfonos, que podías abortar apretando una secuencia: ctrl i ctrl i ctrl i. Si lo hacías bien, abortabas el menú, salías a una shell y desde allá podías conectar a cualquier sitio. De todas formas, también era conocido por casi todo el mundo. Durante muchos años todos los hackers entraban por allí.
-¿Y por qué sólo pillaron a los alemanes?
-Porque buscaban algo que el resto no buscábamos. El resto sólo buscábamos máquinas para divertirnos, para ir haciendo saltitos, dar la vuelta a la Tierra a nivel de comunicaciones: llamo por teléfono gratis hasta Argentina, para entrar en la red X25 de Argentina y hacerla conectar a Estados Unidos por X25, para salir por un módem para conectarte a la BBS de un amigo de Barcelona. Dabas la vuelta para divertirte, aunque no servía para nada, un montón de basura porque había muchos módems sin corrección de errores.
-¿No tenías miedo?
-Sí, claro. Miedo porque trabajaba en Telefónica, miedo porque a veces habías entrado en sitios donde no deberías haber entrado... Una noche, en casa de un amigo, estuvimos toda la noche haciendo hacking, entramos en la Universitat Politècnica de Catalunya, nos paseamos por todas partes. No habíamos dormido y, por la mañana, a primera hora, llamaron a la puerta. Eran tres señores, uno venía a levantar acta y dos eran de la policía judicial. Además, la noche anterior habíamos tenido un pequeño acojone porque se nos había quedado una llamada enganchada y no se soltaba, nos cogió la paranoia, enchufamos 220 a la línea de teléfono para hacerla saltar y saltó. Pero claro. Cuando a las 9 de la mañana alguien llama a la puerta... nos cagamos.
-¿Y?
-Al final, no tenía nada que ver. Se llevaron el ordenador, con todos los logs de la sesión de la noche, todo, los disquetes, y fue porque el compañero había anunciado en una revista que intercambiaba o vendía programas de PC y le había vendido un dBase III a uno de la judicial. El chaval no ha vuelto a ver el PC.
-Cuéntame sobre el grupo portugués ToXyN.
-Buenos chicos. Yo había montado el tema de Internet en LleidaNet, en 1996. Los ToXyN solían montar concursillos entre ellos y entonces era asaltar sitios .es. Intentaron hackear un servidor de FTP de LleidaNet, para saltar desde allí. Lo estuve mirando y me pareció sofisticada la forma como la habían hecho, miré las IPs, intenté hacer un talk root@ y me salió un tío. Nos hicimos amigos. Después hicimos cosas.
-¿Como montar la primera campaña hacktivista conocida en la historia?
-Contra el gobierno de Indonesia. Colaboré haciendo software y hackeando algunas máquinas. Hice exploits a medida para la campaña. Era ir mirando máquina a máquina, qué tenía y hacer los exploits. Entonces, no circulaban exploits libremente por Internet como ahora, te los tenías que hacer. Hicimos máquinas importantes, de ministerios de allí, exploits para AIX, BSD, Linux, Solaris... Hicimos prácticamente de todo. También hice What OS, que detectaba 5 o 6 SO y que después sería QueSO. Era para montar scripts de búsqueda de todos los dominios .id. Dominio que había, buscábamos la máquina www, la ftp, la mail y la news y intentábamos atacar las cuatro. Montamos tantos ataques automatizados como pudimos. Y, cuando veías algún positivo, intentabas acabarlo manualmente. Hicimos miles de máquinas.
-¡A mano!
-Algunas eran scripts ya preparados. Cuando tienes el exploit hecho y nadie conoce la vulnerabilidad, es realmente fácil.
-A pesar de estas historias de hacking, en tu kernel eres un "coder".
-Sí.
-¿Has hecho virus?
-Para PC, no. Para MSX, uno. Para dedicarte a esto tienes que dominar bien el Assembler y yo dominaba el Assembler para CPUs de 8 bits. Pero accedí al mundo del PC programando ya en C. Y tampoco me ha llamado nunca la atención.
-¿Por implicaciones morales?
-Hay partes de algunos virus que son inmorales. Por ejemplo, un amigo hizo el AntiTel (AntiTelefónica) y tenía toda la razón de ser, lo que pasa es que hacer que te formatee el disco duro ya era pasarse. Aunque entiendo que está bien que hagas la broma: de vez en cuando hacía salir un cartelito de Telefonica Te Tima, que en aquel momento era verdad.
-Los programas por los que más se te conoce son QueSO y NePED...
-QueSO es el primero de este estilo, de reconocer sistemas operativos, antes de Nmap, que coge ideas y así lo reconoce en su documentación. Básicamente, es el primer programa que separa la lógica de análisis del sistema operativo de la base de datos de reconocimiento de sistemas operativos, nada más. No es tan meritorio, eran técnicas conocidas de muchos años, no inventé nada, sólo que a nadie se le había ocurrido.
-¿Y NePED?
-Fue una apuesta, un pique tomando cervezas: no se pueden detectar sniffers con un programa, no lo conseguirás, a que sí, a que no. Si buscas los tres pies al gato, al final los encuentras. Y funcionó.
-¿Fueron los últimos programas de seguridad que escribiste?
-Tampoco es que me dedicase a esto. Fue para hacer la versión Internet de lo que hacía cuando era más joven. Pero para mi la seguridad es bastante aburrida.
-¿Por qué?
-Es como un juego del gato que persigue al ratón, me parece sin sentido. Si eres administrador, te acabarán entrando y la mayoría de veces no será culpa tuya. Es un trabajo donde sabes que, por mucho o poco que te esfuerces, acabarás fracasando. Tiene que ser muy triste, para un tío que tiene 300 máquinas en un hosting, que nunca podrá sentirse un administrador de sistemas de puta madre, porque cada semana debe tener 40 incidencias lo menos. Es mejor buscar algo que te aporte algún tipo de recompensa.
-¿Y hacer de intruso?
-Cuando tienes dos hijos, estás casado, pagando una hipoteca, lo que no te planteas es irte dedicando a hacer de salteador de la red, porque sabes cómo acabarás, has visto cómo han acabado los que creían que no pasaría nada.
-¿A quién quieres más, a Richard Stallman o a Eric S. Raymond?
-Conozco personalmente a Stallman, a Raymond no, pero hay muchas cosas de Stallman con las que no coincido, me gusta más la postura liberal de Raymond que el libertinaje obligado, te obligo a ser libre, de Stallman. Lo que hace Stallman es una imposición, me recuerda, aunque la comparación es odiosa, la postura del Papa, que dice que está en contra del imperio de la relatividad. Pues a Stallman le pasa un poco esto: las cosas son así porque yo las digo, las mires por donde las mires, y no te permite mirarlas de otra forma. Yo he cambiado muchas veces en la vida y no entiendo a alguien que tiene tan claro que esto es la verdad absoluta y no quiere escuchar a nadie: esto es así porque Dios lo dice.
-¿Cómo ves el soft libre?
-Está en un buen momento, a pesar de problemas, putadas, campañas. No hay manera de pararlo. Soy bastante optimista. Somos muchos y, además, hay pasta detrás. Ahora no se hace sólo porque hay mucha gente con muchas ganas, sinó que además hay gente que paga a gente que tiene muchas ganas. Hay personas que están trabajando en su casa, haciendo soft libre para Novell, y les pagan cada mes. Hace unos años, esto no pasaba.
-Cierto.
-Ahora, se está trabajando en Mono porque, si Microsoft triunfa, aunque no lo pondría en condicional, porque siempre triunfa, cuando MS triunfe en este tema, nosotros también tengamos puesto un pie allí, es imprescindible. Esto era impensable hace años. Estamos obligando a MS a que toda su estrategia de marketing vaya orientada a decir que lo hacen mejor que nosotros. Ahora, sólo tienen un competidor y es el soft libre.
-¿Qué te gusta de la Internet de hoy?
-La malla de weblogs, forman redes de informaciones y opiniones muy relacionadas entre sí, que se encadenan las unas a las otras y se van retroalimentando. Me gusta lo que significan como concepto, como neuronas, unidades de información unidas a otras que permiten que los que tocamos un tema concreto nos enteremos de todo. Es una forma mucho más dinámica de navegar que yendo al buscador.
-¿Tu weblog preferido?
-Miro Barrapunto. Y Fukowski me divierte mucho.
-¿Los hackers de hoy son tan buenos como tú?
-Seguro que los hay mejores. Es un tema de estar al día, nada más. Además, es mucho más fácil ser o parecer un buen hacker hoy porque circula más la información. En los 90, no circulaba una mierda. Si querías un troyano, te lo tenías que hacer, no los encontrabas en BBS ni tenías Google. Ahora, tienes el código fuente de varios Unix colgados en Internet, por si quieres hacer guarradas. La información sobre qué programas son vulnerables, los exploits, siguen circulando, a pesar de los gobiernos. Si pones mi dirección antigua de Apòstols en un buscador, todo lo que te saldrá prácticamente serán exploits míos.
-O sea, que lo tienen fácil.
-Sí.
-Abuelete, ¿algún consejo para estos hackers?
-Que no hagan el tonto en su país ni en países donde haya extradición directa.
-¿Te gustaría que tus hijos fuesen hackers?
-No me importaría que programasen, pero cada vez está más peludo hacer el tonto, la policía está preparada para no perdonar ni una. Por tanto, de hacking les diría que no.
-¿Qué es un gurú?
-Una palabra en sánscrito que significa "el que espanta la niebla".



Mercè Molist





LA MEMORIA DEL GURÚ


"Empecé a los 14 años, aprendiendo informática de compañeros de 4º y 5º de FP. Una cosa llevó a la otra y aprendí microprocesadores por mi cuenta, lo sabía casi todo de la familia 6502. En mi escuela tenían unos equipos con 6502, programables en BASIC y Assembler, en aquella época sólo conocía el Assembler. Las makinas se llamaban Acorn-ATOM. Con la pasta de recoger fruta me compré un ordenador HitBit de Sony (con cassette y 16K de RAM) el año 1984, porque en la escuela no me dejaban estar más horas en el aula de informática.

Después curré haciendo el mantenimiento eléctrico y de automatismos de la escuela, por las mañanas, por la tarde a clase. Con la pasta compré impresora, ampliación de memoria a 64Ks, algunos juegos de Konami... y conseguí ¡¡UN MODEM pirata!!! Peaso módem a 300 bauds. Menudo problema: ¿cómo coño se conecta un módem a mi MSX? Me pedí un RS232 de importación. Fantástico, ya tenía módem, RS232 y en una revista había visto un número de teléfono de un BBS. Hice 4 líneas en BASIC para montar un mini-programa de comunicaciones, que me permitía activar y desactivar la captura de sesión hacia la impresora.

1988. Entro a currar en Telefónica (en prácticas). Poca pasta, pero me compré el MSX2, ¡¡con disketera y 80 columnas de texto!!

Me hice una versión mejor del programa de comunicaciones, que me permitía bajar y subir ficheros con protocolo X-MODEM. El programa tuvo mucho éxito en el mundo MSX, se llamaba COMS3. Conseguí un compilador de C (limitadísimo) para CPM, lo adapté ligeramente a MSX-DOS, y aprendí C. El primer programa fue el COMS4, hecho en C y ASM de Z80 (también era libre). Se utilizó durante mucho tiempo a nivel mundial.

1989. Estuve en una empresa de informática local, monté un sistema anticopia basado en hardware.

1989-2000. Vuelvo a Telefónica. Hasta Julio de 2000 hago de administrador de sistemas (Theos, IBM S/1, Banyan, SunOS, HP/UX, AIX, Solaris, Linux...) y de programador de cosas relacionadas con sistemas y comunicaciones.

1989-1990. En aquella época, rondaba las redes X25, buscando Unixes, Vaxens y chats multiusuario. Conocí a gente muy simpática, unos se llamaban Glaucoma porque atacaban la red IRIS. Empezamos a hacer el idiota juntos, llamando gratis, entrando por el morro a X25, saliendo por out-dials de compañías americanas. Al final, alguien dijo que éramos un grupo y podíamos llamarnos Los Apòstols. Éramos 2 de BCN, yo de Lleida, uno de Zaragoza, uno de Alicante y uno de Tenerife. Si entrábamos en un Unix, teníamos una perfecta imitación del login que nos permitía utilizar cualquier cuenta del sistema con el password "joshua!" (¿podríamos decir que ya era un rootkit? :) En los VAXes, no podíamos sustituir el LOGIN.EXE, así que hacíamos usuarios que pareciesen procesos del sistema (SYS$PROCESS, por ejemplo) pero con privilegios.

1990. Compré un PC-XT de segunda mano con 640Kb de RAM y 10Mb de disco duro. Allí instalé mi primera BBS: MSX-Access. Seguí diseñando cosas para MSX y utilidades. Adapté el compilador libre de C para 8 bits (micro C) a Z80 optimizado. Mucha gente lo utilizaba. Fuí ampliando el módem: 2400, 2400MNP y ¡¡14.400!! Pagué 140.000 pesetas por él.

1991. Podemos decir que Apòstols ya no existe.

1992. Me caso, monto LleidaNet, me compro más PCs, abandono el MSX y me dedico al Unix (Coherent 286, Coherent 386 y LINUX). En aquella época, hice cosas bastante interesantes, recuerdo una librería libre y en código fuente, para C++, que te permitía multitask cooperativo desde MS-DOS. Algunas cosas para automatizar tareas de Fidonet (era coordinador de Catalunya).

1994. Montamos nuestro primer webserver, un CERN, sobre Linux, en la Universitat de Lleida, conectada a la Universitat Politècnica de Catalunya a 9600.

1995. Montamos Internet en LleidaNet y nos hacemos ISP, todo bajo Linux. Sólo tenía tiempo de codificar para nuestros clientes.

1996. Registramos Apostols.org con Rampa de Encomix. Conozco a los chicos de ToXyN mientras intentaban hackear algunas máquinas de LleidaNet. Les hago un talk root@ip_del_hacker y nos hicimos coleguillas. Me reintroduje en el mundo de la (in)seguridad.

1997. El tema ISP ya no me absorbe y me dedico a codificar de nuevo. Algunas cosas impublicables, que utilizaron los amigos de ToXyN en la campaña contra Indonesia, por la Independencia de Timor del Este. Hice algún módulo para Roxen, bajo GPL, y bastantes aportaciones al código del webserver.

1998. Me dedico a hacer cosas relacionadas con el IRC, hasta que domino bastante bien el sistema. Hago QueSO y NePED, sigo aportando cosas allí donde puedo... A final de año se provoca la escisión de Arrakis a IRC-Hispano y, en una noche, montamos lo que ya tenía funcionando en la red IRC de DarkNet. Monto Linux.Apostols.Org.

1999. Todo el año dedicado a cosas del IRC-Hispano: services, nuevos bots, juegos online, mantenimiento y mejoras en el ircd. Alan Cox me acepta un pequeño patch para el kernel de Linux, no sabes lo ke mola que salga tu nombre en el kernel :)

1 julio de 2000. Dejo Telefónica, LleidaNet y dimito de Admin/Oper/Devel del Hispano."


Copyright 2005 Mercè Molist.
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